Néstor Sánchez

Director de Bonyé: ¨En la esencia de la buena música caribeña se aloja el jazz como un elemento consustancial a su estructura rítmica y armónica¨

Recientemente, nos reunimos con Néstor Sánchez para hablar sobre el Colectivo Bonyé.  Néstor es un ser humano muy especial, a quien le tengo gran admiración y respeto. Siempre alegre, elocuente, conversador, dispuesto y servicial – nuestro encuentro se extendió- el material que cubrimos es importante, por lo que decidimos publicar la entrevista en su totalidad y sin cambiarle una palabra, una coma, un punto, un suspiro. A continuación ¨un conversao con Nestor¨!!

Jazz en Dominicana (JenD) ¿En tus propias palabras, qué es Bonyé?
Néstor Sánchez (NS). Bonyé es muchas cosas. Primero, un grupo de amigos que luego de pasar un buen tiempo tocando instrumentos de percusión fueron seducidos por el público hasta formar una banda musical. Segundo, un banco de datos, una arqueología musical, un museo de ritmos afroantillanos, que busca preservar temas representativos del son, la guaracha, el bolero, el merengue, el compa, diré, la plena, la cumbia y la salsa, tocados con estricto apego a su formato original. Tercero, un evento músico cultural en las Ruinas del Monasterio de San Francisco, que reúne a miles de dominicanos y extranjeros cada domingo desde hace once años. Por último, Bonyé es alegría, confraternidad, decencia y exaltación de los símbolos patrios.

JenD ¿Quiénes conforman la agrupación?
NS: En el frente están Félix Báez, Roberto Bobadilla, Franklin Soto, Francisco Chino Mendez y un servidor. El respaldo musical lo integran dos trompetas, dos saxofones, un trombón, bajo, piano, cuatro cubanos, conga, timbal, tambora y percusión menor (clave, guira, guiro, y maracas), como sigue: Luís Miguel Roca Cruz -Trombón; Pedro (Juancitón) Coco- Cuatro; Julián Jacques – Bajo; Nelson; Juan Antonio (Junior) Guío – Bongó y tambora; Carlos Gómez- Timbal; Carlixto Heredia y Rafy Rodríguez – Trompetas; Whollfan Mejía – Saxofón alto; Juan Vicente Rojas – Saxofón tenor; y, José Angel Capellán – güira y maracas

JenD ¿Cómo se originó y desarrolló el fenómeno Bonyé en la Zona Colonial cada domingo?
NS: Luego de reunirnos con regularidad en un bar de la calle Hostos para tocar percusiones sobre música grabada, los integrantes del frente debimos movernos hacia el Callejoncito de Don Guillermo, a un costado de las Ruinas. A partir del primer domingo comenzó a llegar público. En los siguientes añadimos bajo, guitarra y trompeta para sones cubanos. Así en cada tarde dominical vimos crecer la audiencia y debimos mudarnos nuevamente, esta vez para las escalinatas del Monasterio. Desde entonces, hemos logrado construir un espacio para el esparcimiento de la familia capitaleña y visitantes extranjeros, de 6 a 10 de la noche, que al día de hoy registra 561 tardes dominicales, 2,004 horas de audiciones en vivo y aproximadamente 1,405,000 visitantes.

JenD ¿Qué significa este proyecto para ti?
NS: Haber contribuido a crear un movimiento cultural de preservación de la buena música afroantillana congruente con nuestros valores y formación cívica. Contribuir a fortalecer los símbolos de la dominicanidad honrando las fechas patrias y venerando cada domingo a nuestra Bandera Nacional, que nos distingue como pueblo independiente. Una tarima siempre abierta para cantantes, declamadores, poetas, grupos de danza y músicos dominicanos y extranjeros, quienes han promovido sus cualidades artísticas con altura y dedicación. El apoyo de las Juntas de Vecinos de la zona, el Ministerio de Turismo, el Cluster de Turismo de Santo Domingo, la asistencia permanente de la POLITUR, la AMET y la Policía Nacional, así como el respaldo de las compañías Brugal y Presidente. Justo es señalar que los residentes de San Miguel y Santa Bárbara han visto crecer sus pequeños negocios, el turismo ha fluido considerablemente motivando el embellecimiento de sus viviendas y se han empoderado del fenómeno Bonyé como un bien apreciado por la comunidad. Tal vez por todo eso hemos sido declarados por la Sala Capitular del ADN como Patrimonio Músico Cultural de la Ciudad de Santo Domingo.

JenD: Una vez me comentaste: ¨En la esencia de la buena música caribeña se aloja el jazz como un elemento consustancial a su estructura rítmica y armónica¨- ¿puedes abundar sobre el comentario, tomando en cuenta la cercanía de  Bonyé con el Dominican Republic Jazz Festival?
NS: Sea en rumba, guaguancó, son, merengue, salsa, bolero y en todos los demás géneros afroantillanos, el jazz brota naturalmente al momento de la improvisación. Los ejecutantes del Solo casi nunca están conscientes de ello porque lo hacen con naturalidad y sin apego a la partitura. Yo lo entiendo como el feeling que acompaña a cada experiencia de improvisación y que conecta al género desde el cual se ejecuta con formas de jazz conocidas. Me atrevo a decir que cada Solo, cada momento de la improvisación, es un microcosmo que esconde muchos estilos de jazz. Ojalá no me crucifiquen!

JenD ¿Cómo te sientes al participar con regularidad en el DRJF?
NS: Nuevamente sorprendido! En el Festival de Jazz de Casa de Teatro pensé que la invitación a Bonyé era otra de las osadías a la que nos tiene acostumbrado Freddy Ginebra y un atrevimiento de nuestra parte en aceptarlo. Luego vino la invitación a participar en el Festival de Jazz de Sajoma, otra experiencia inolvidable. Presumo que como en los festivales de nuestro país predomina la modalidad del jazz latino, en algún momento del programa es aconsejable incluir una banda que interprete los ritmos desde los cuales se hace este tipo de jazz. Bonyé reúne ese amplio repertorio con calidad sonora, capacidad de improvisación, buen gusto y mucha alegría.