Para 1966 Roberto Flores se encontraba ingresando a la Escuela Nacional de Bellas Artes en San Francisco de Macorís. Allí obtuvo conocimientos de la mano de los reconocidos pintores Pedro Villena, Domingo Liz y Jaime Colson. Sin embargo, la técnica del fresco atrapó el interés del artista haciendo que se inclinara hacia ella.
Pronto el estudiante se convirtió en maestro. Es un honor para cualquier alumno llegar a ser profesor de la academia donde estudió, para Flores no fue una excepción ostentar este privilegio, pues llegó no solo a Bellas Artes, sino también a ser catedrático de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
SU TRABAJOEs conocido como el primer muralista dominicano ya que fue quien inició la elaboración de murales en distintas paredes y edificios del país.
El fresco Alegoría a la Virgen del Carmen, que muestra ángeles en diversas posiciones, fue declarado Patrimonio Cultural de República Dominicana por la Comisión Permanente de Cultura de la Cámara de Diputados para el año 1998. Sin embargo, el 27 de mayo del 2011 el párroco Johnny Durán, mediante el voto de cuatro de regidores, despojo de esta condición el trabajo del artista.
Las razones expuestas fueron que supuestamente estos ángeles dan la impresión de ser homosexuales. Esta acción llevó a que Roberto Flores sufriera un accidente y terminara aislándose no solo de la ciudad, sino también de los pinceles y el lienzo.
Había presentado su trabajo en museos internacionales y al “ver el acto realizado por este párroco, su vida quedó marcada para siempre, pues no podía entender que el arte había caído en manos de ignorantes”, explica su hija Flor Andromeda Flores. Nota. Actualmente, es reconocido como el artista de las montañas por preferir estar rodeado de la naturaleza antes que la algarabía de la ciudad.
Consideración sobre su arte
Fuente: www.listindiario.com