Los partidos de la oposición de Haití nombraron el domingo a un líder de transición frente al cuestionado presidente Jovenel Moïse, al que acusan de haber prolongado ilegalmente su mandato de un año. El mismo día, el mandatario anunció un intento de asesinato y golpe de Estado.
Este acto de la oposición se produce apenas unas horas después del que la oposición política, el poder judicial y muchas organizaciones de la sociedad civil consideraron como el último día en el poder de Jovenel Moïse.
Moïse afirma que su mandato al frente del país caribeño se extiende hasta el 7 de febrero de 2022. El desacuerdo sobre la fecha surgió porque Moïse fue elegido en una votación que fue anulada por fraude y luego fue reelegido un año después.
«Estamos esperando que Jovenel Moïse abandone el palacio nacional para poder proceder a la instalación de Mécene Jean-Louis», declaró a la AFP el opositor André Michel.
Con nuestra corresponsal en Puerto Príncipe, Amélie Baron
En la pista del aeropuerto de la capital, de camino a Jacmel para el carnaval, Jovenel Moïse anunció en pocas palabras que el grupo de 23 personas detenidas por la mañana había querido «atentar contra la vida» del mandatario. El primer ministro, Joseph Jouthe, dio más detalles al mediodía.
«Estas personas se habían puesto en contacto con funcionarios de seguridad del Palacio Nacional, oficiales de alto rango que tenían la misión de detener al presidente y llevarlo a esta casa de Petit Bois, para facilitar la instalación de un nuevo presidente interino que dirigiera la transición. Pobre gente, incluso encontramos el discurso de investidura de este presidente en manos de los detenidos”, aseguró.
Este supuesto intento de golpe de Estado coincide este domingo con lo que la oposición y muchas organizaciones de la sociedad civil consideraban el último día del mandato de Jovenel Moïse. Sus detractores denuncian las detenciones políticas, lo que alimenta las sospechas de una parte de la población haitiana que ya desconfía mucho del gobierno. Este lleva un año gobernando por decreto y parece impotente ante las bandas que ordenan secuestros a diario.
Fuente: www.rfi.fr/es