Febrero 2022
MAESTROS Y MAESTRAS
Estamos iniciando el nuevo semestre académico 2022. Todavía sentimos el peso sobre nosotros y el cansancio de una virtualidad que nos condujo hacia un aprendizaje tecnológico urgente, acelerado e irrevocable; y con su gran diversidad de choques, frustraciones y atropellos, propios de el que aprende a manejar en el camino sin un suficiente entrenamiento previo. Podemos afirmar que de cierto modo nos hemos estado haciendo tecnológicos a pesar de nosotros mismos.
Sabemos que nuestros alumnos de la UASD, a pesar de sus vicios académicos e indisciplina tecnológica que tanto nos afectan, sufren también nuestros mismos cansancios y atropellos tecnológicos; y aún mayores, no solo por los niveles de carestía y desamparo en los que viven, sino también por el peso de una cultura de dispersión y entretenimiento que a todos nos arropa.
Si bien es cierto que según el enfoque por competencias, venimos entendiendo muy bien que es un excelente llamado a la responsabilidad del alumno como principal protagonista de su aprendizaje, el no darle el pescado de la memorización, sino enseñarle a pescar con el desarrollo de estrategias y técnicas de investigación; no menos cierto es que también es un llamado a una mucha mayor y mejor presencia y un mucho mayor y mejor desempeño del profesor como facilitador en el diseño de conductas y de entornos de aprendizaje.
No es un llamado a retirarnos, o a lo menos posible, para que el alumno se la arregle como pueda tirándolo a lo hondo para que aprenda a nadar como protagonista de su proceso; es más bien un llamado a acompañarle, guiándole según nuestras experiencias hacia el conocimiento del río, el mejor tipo de caña y de nylon, cómo nadar, qué peces y cómo pescar.
Lo mejor que podemos hacer para él sostenimiento motivacional de nuestros alumno uasdianos es estar presentes de la manera más personalizada que nos sea posible, aún y sea de forma virtual, entendiendo, escuchando y acogiendo a cada alumno con espíritu inclusivo, flexibles, abiertos, y participativos; y según la necesidad y situación de cada uno. Atenciones todas ellas implicadas en el acompañamiento propio del facilitador dentro del currículo por competencias.
Es claro en nuestras historias de alumnos, que no crecimos tan solo gracias a nuestra propia responsabilidad. Todos recordamos la presencia de buenos profesores que sacudieron nuestro límites y nos abrieron nuevos horizontes.
Nuestros muchachos nos necesitan. Feliz inicio de semestre.
Profesor Martin Astacio Frías.
Presidente de la Asociación de Profesores de la UASD Centro Higüey.